Estadisticas

martes, 15 de noviembre de 2011

El famoso "Carpe Diem"

Foto: Patri Frias

La expresión "carpe diem" no debe su fama al hecho de aprovechar el tiempo para hacer el mayor número de cosas posibles. Hace referencia a aprovecharlo haciendo lo que realmente deseas. 

Puedes emplear todo tu tiempo en hacer una única cosa, que mientras te haya llenado de satisfacción ya merece la pena.
Ocupamos nuestro día a día en cumplir con las expectativas de una vida medianamente planeada casi desde que nacemos. Tenemos que sacarnos una carrera, tenemos que trabajar, tenemos que crear una familia...tenemos, tenemos...
La vida de todos nosotros sigue, en mayor o menor medida, el mismo patrón implantado culturalmente por una determinada sociedad (llámese rutina adquirida).
El problema es que lo hacemos de manera que siempre andamos para llegar a una meta, sea cual sea. Y cuando hemos logrado llegar a esa meta, no nos damos cuenta y ya estamos caminando hacia otra diferente sin ni siquiera degustar la anterior como dios manda.
El tiempo pasa cada vez más deprisa ocupado en preocupaciones propias de una responsabilidad con un futuro aparentemente claro. 

Pero ¿qué pasa cuando nos enteramos de alguna desgracia? ya sea ajena o propia, cercana o lejana. 
Todos llegamos a la misma conclusión; la vida son dos días, hay que aprovechar el tiempo, nunca se sabe...y nos entra un ansia repentina de querer empezar el día comiéndotelo sonrisa tras sonrisa y acabarlo poniéndonos el pijama llenos de satisfacción por haber hecho lo que realmente deseábamos. 
Nos proponemos hacer lo que realmente nos guste, seguir con las obligaciones que nos ocupan el día pero disfrutándolas al máximo, haciéndolas porque realmente queremos no porque tengan que hacerse simplemente. 
Eso sí, es una sensación tan pasajera y fugaz que normalmente no nos deja ni un poco de tiempo para ponerlo en práctica y sin darnos cuenta volvemos a estar inmersos en nuestras ocupaciones. ¿Os habéis sentido alguna vez así?

Con todo esto sólo pretendo llamar un poco la atención de esa sensación, la de cada persona que este leyendo esto, aunque solo logre asomar la cabeza por unos segundos, eso significará que no sólo aflora cuando hay desgracias cerca. 
La motivación es algo que se traspasa, se contagia y yo quiero motivaros ahora que la mía está en auge, quien sabe hasta cuando, pero por lo menos el tiempo suficiente como para escribir esta entrada :)

Os dejo un video de un fragmento de la película "El curioso caso de Benjamin Button", de sólo un minuto de duración, que resume de una manera más precisa y bonita lo que os he intentado transmitir. ¡Espero que os guste!




4 comentarios:

  1. Que bonita la entrada...=) me ha apetecido volver a ver la peli!

    ResponderEliminar
  2. Morral! Me estoy enganchando a tu blog! Gracias por esta entrada, especialmente HOY necesitaba leer algo asì! Un abrazo! Aldreen

    ResponderEliminar
  3. Me alegro mucho Aldreen!! Me llena de orgullo que te lleguen mis palabras :)

    ResponderEliminar
  4. CARPE DIEM...Sin bajar la guardia y a la vez pisar fuerte por las laderas que te lleven a tus destinos con esa positividad que desprendes y ésa seguridad que reflejas.
    Motivación...si, bonita palabra para el que sabe motivar y para el que recibe de quién motiva, tú, lo haces! y lo haces muy bien!...ójala pudieras ser mi verdadera amiga, pero no siempre los caminos son los que queremos y otras , los que queremos se tuercen, pero de todos éllos, siempre hay que sacar lo positivo y yo saco de haberte conocido, lo mejor!
    Como díce tu amigo...me estoy enganchando a tu blog.
    Quieres un aplauso? pues van dos! APLAUSO, APLAUSO!

    ResponderEliminar